Apostar por nuevas estrategias digitales para promover el crecimiento de marca se convirtió en un reto que David Martin ha tenido que lograr. Con 14 años de experiencia en el mundo de la publicidad y tecnología, el español se desplazó por España, Reino Unido e Irlanda ganando conocimientos en grandes multinacionales.
El gran paso lo dio cuando se enroló en las filas de Google, donde trabajó dentro de los equipos de desarrollo de negocio para conectar las necesidades publicitarias con los equipos tecnológicos. En ese momento, junto a otros tres compañeros, decidió incursionar en algo propio y así fue como nació su agencia digital Apache.
En esta empresa, se enfocó a dar consultorías en favor de la transformación de las empresas y el aprovechamiento de oportunidades de negocio del mercado digital. El éxito de la organización cayó a ojos de LLYC, empresa que en mayo de 2021 concretó la compra de Apache para potenciar sus servicios de Deep Digital Business.
Así, David Martín Muñóz empezó un nuevo camino como director general de Deep Digital Business Región Andina en esta integración de Apache y LLYC. El profesional se centrará en unificar los servicios de la unidad en Colombia, Perú y Ecuador, con un equipo de 30 colaboradores de las áreas de influencia, deep learning, creatividad y marketing digital.
Se dice que en un futuro no muy lejano las cookies dirán adiós. ¿Cómo afectará al mundo del marketing y de la publicidad?
El final de las cookies está muy cercano, ya a finales de 2023. Esto cambiará el ecosistema publicitario ya que gracias a estas herramientas las empresas podían saber los datos de sus clientes y sus procesos de navegación. Una vez que desaparezcan, las empresas que no hayan desarrollado procesos propios de recolección y análisis de datos, estarán en problemas. Las empresas deben desarrollar proyectos de First Party Data.
En ese caso es positivo, porque es parte de una tendencia necesaria en cuanto a la seguridad de datos. Cada vez, los usuarios quieren ser dueños y tener el control de a quién dan sus datos y cómo los usan. Esto con el fin de que los internautas tengan una publicidad consciente en función a su individualidad. Es algo que ya tenía que ocurrir.
Si de verdad desarrollan esta parte tecnológica de First Party Data, lograrán una relación más auténtica con los usuarios. Al final, querrán darles experiencias más complejas para así alcanzar más puntos de contacto, saber más de los usuarios, y poder ser más relevantes en sus productos y publicidad.
Habrá que aplicar desarrollos de analítica avanzada para gestionar datos a los que las empresas deberían migrar. Pero además de las tecnologías, es indispensable contar con más personas especializadas. Las organizaciones deberán contar con equipos de CRM, marketing automation, ingenieros de datos y algún Chief Data Officer en esta carrera por ir de lado de la coyuntura tecnológica y publicitaria.
Bueno, es importante que el proceso de migración empiece ya y no cuando las cookies ya desaparezcan. Es más, Google anunció que también en 2023 Google ADS y Analytics desaparecerán, lo que significa que la analítica avanzada dejará de funcionar. Entonces hay que preocuparse desde ahora. Las estrategias de migración deberían empezar ya hacia Analytics 4, que entrará en esta nueva onda de privacidad de datos.
Yo creo que en el futuro la tendencia será de entregar los datos a las marcas siempre y cuando seamos conscientes de qué hacen con aquello que les damos. Debe ser una relación limpia y transparente que de un valor añadido. Las marcas tendrán que entrar en esa relación real con la que conoce verdaderamente al usuario.